MARCELO JAVIER NEIRA NAVARRO
Fecha de publicación 25 de mayo de 2020
La primera ciudad con influencia europea que se construyó en américa fue Santo Domingo en el siglo XVI. Y en ella se utilizó el plano de damero (Richard Kagan, Un mundo sin murallas, la ciudad en la América Hispánica colonial, (págs. 51-86), en José Ignacio Fortea Perez (Ed.), Imágenes de la diversidad. El mundo urbano en la corona de Castilla (S. XVI-XVIII), Universidad de Cantabria, Cambria, 1997).
En efecto, el modelo urbano traído por los españoles a los nuevos territorios fue el de damero. Aunque su origen no está claro. Se han encontrado vestigios en Babilonia (Heródoto, Los nueve libros de la Historia. Buenos Aires, El Ateneo, 1961, p. 101). También se han encontrado restos en campamentos militares romanos, como las ”Bastides” (villas fortificadas) en Francia; en la ciudad de Santa Fé, España (Richard Morse, Some caracteristics of the Latin American Urban History, American historical review, 67, 1962, págs. 317-338); o también en ciudades españolas relacionadas a ideas medievales de la “ciudad ideal” de San Agustín (Gabriel Guarda “Santo Tomás de Aquino y las fuentes del urbanismo indiano”. Boletín de la Academia chilena de la Historia, 72, Santiago: 5-105; también en Richard Kagan, Id.). De todas maneras, esta forma urbana se institucionalizó en la ley española, pasó a las Colonias y se desarrolló en las nuevas repúblicas.
En el origen de todas estas ciudades, probablemente el primer criterio utilizado fue el de seguridad a partir precisamente de la Plaza de Armas el núcleo fundamental del poder de las mismas. Pero también es cierto que hay un criterio de vigilancia de las poblaciones. A propósito, el padre Alonso de Ovalle, a mediados del siglo XVII, señaló que en Santiago,
…de cualquier efquina, en que vn hombre fe ponga; ve quatro calles vna al Oriente; otra al Occidente, y las otras dos, a feptentrion, y a medio dia; y por cualquiera de ellas tiene la vifta libre…(Alonso De Ovalle, Histórica relación del Reyno de Chile, Francisco Caualo, Roma, 1646, p. 152).
En cualquier caso, la mayoría de las ciudades históricas chilenas, incluida la ciudad de Osorno nacen y se desarrollan utilizando la idea del plano de “ajedrez”.
Ya en pleno siglo XX, la ciudad de Purranque igualmente utilizará el cuadriculado. Y esta habría sido una iniciativa exclusiva de Tomás Brugos, su inspirador. Y el plano que no tiene ninguna complejidad, probablemente fue inspiración del de la ciudad de Osorno.
Siendo Alcalde J. Vicente Montecino Sangmeister, el 16 de abril de 1961, para el cincuentenario de la ciudad, publicó en el diario La Prensa de Osorno, un homenaje de la propia Municipalidad de Purranque. Aquí, se publica el que habría sido el plano original de la ciudad encargado por Tomás Burgos (La Prensa de Osorno, 16 de abril de 1961, Segundo Cuerpo, pág. 2).
Sin embargo, una de las particularidades que no se observa en el plano, corresponde a la antigua forma urbana del trazado de las calles denominada “ochavo”. Consiste en intervenir las esquinas de las calles rectas, cortándolas en ángulos de 45°. Esta forma era utilizada con el objeto de que los ciudadanos que conducían carruajes o caballos tuvieran mayor visibilidad, evitando con ello colisiones múltiples. En la ciudad de Purranque todavía que bastantes de estos “ochavos”. Pero el “ochavo” se observa en la conjunción de las calles 21 de mayo con Bernardo O´Higgins, tal como se observa en el video que presentamos a continuación.
Para profundizar en la problemáticas del plano urbano de «tablero de ajedrez», clicar los siguientes artículos:
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